Coincidiendo con el año en que Catalunya es Región Mundial de la Gastronomía, la Federació Catalana d’Associacions de Gremis de Flequers presenta un recetario con 5 panes representativos del patrimonio gastronómico y cultural de esta comunidad autónoma.
Con estas recetas, que se pueden consultar on line, no sólo se quiere preservar la cultura del pan como elemento identitario de un territorio, sino que también se quiere dar voz a los panaderos artesanos y dar valor al oficio.
Pa de l’Aixada
Jordi Jorba (Forn Jorba, Manresa)
Pan greñado con la forma de la confluencia de los ríos Cardener y Llobregat.
El Pa de l’Aixada se inspira en el alimento básico que nutría a la población catalana durante los siglos XIV y XV, coincidiendo con el contexto que recrea la Feria de l’Aixada. Esta feria conmemora el milagro de la luz y la construcción de la Acequia de Manresa, buscando revivir fielmente el ambiente de la Edad Media.
Pa de Ronyó
Rosselló (Les Borges Blanques, Lleida)
Con generaciones de oficio y un espíritu incansable, Rosselló continúa trabajando este pan rústico de la llanura de Poniente, con forma de riñón y hecho en horno de leña.
Pa de Sant Jordi
Georgina Crespo (Fleca Balmes, Barcelona)
Georgina Crespo mantiene vivo el espíritu de su padre Eduard Crespo, creador de este pan emblemático con el que cada 23 de abril se celebra Sant Jordi, la fiesta más literaria y floral de Catalunya.
Pa de Tramuntana
Enric Colls (Fleca Can Companyó, Sils)
Pan fuerte y aromático que habla del viento del norte, de la fuerza ampurdanesa y de la panadería como oficio de resistencia.
Pa Foradat
Xavier Pàmies (Forn Sistaré, Reus)
Pan con especias y un agujero característico que se suele hacer la vigilia de Navidad.
Antiguamente se llamaba el Turrón de los pobres y hoy en día es indispensable en las celebraciones navideñas en las comarcas del sur de Cataluña, sobre todo en Reus, donde los hornos artesanos nunca lo han dejado de elaborar.