El grupo Kalise Menorquina ha decidido doblar el presupuesto que destina a publicidad con el objetivo de ganar notoriedad y aumentar su cuota de mercado. A diferencia de los dos primeros fabricantes del sector, las multinacionales Nestlé y Frigo, que basan su publicidad en la imagen de mujeres famosas (Elsa Pataky con Nestlé y recientemente Eva Longoria, con Mágnum), la Menorquina apuesta por una comunicación publicitaria distinta a la de sus competidores. La empresa ha elegido a un hombre corriente desde el punto de vista de la imagen, aunque también es famoso: Uri Geller, el mentalista que a finales de los setenta conmocionó a la audiencia televisiva española doblando cucharas.
La asociación entre los productos de la Menorquina y Geller se centra precisamente en la cuchara, que no sólo reúne los valores de calidad y sabor, sino también porque este utensilio es “un referente de salud”, explica uno de los fundadores de la empresa de comunicación Australia, Alex Ripollés, que se encargará de la próxima campaña.
El grupo Kalise Menorquina ocupa la tercera posición en el mercado de helados en España, pero a gran distancia de los dos primeras multinacionales, Nestlé y Frigo.