El burgalés Alejandro Serrano abrió un restaurante gastronómico con tan solo 21 años y conquistó una estrella Michelin tan solo dos años después, convirtiéndose así en el chef español más joven en lograrlo. Un hito excepcional teniendo en cuenta que entre medias tuvo que lidiar con los estragos de la pandemia. Por si fuera poco, este chef ha ido acumulando otros reconocimientos de calado, desde un sol Repsol hasta la mención como uno de los 30 talentos por debajo de 30 años elaborado por Forbes.